Diez razones para estar en el Pure Triathlon
El decálogo del Pure Triathlon Marina D´Or
Quedan poco más de seis meses para que se celebre la segunda edición de Pure Triathlon 226 Marina d’Or, En su primera edición, Pure logró reunir más de 700 participantes entre las pruebas Full y Half en un fin repleto de actividades lúdicas complementarias a la carrera. Este año las inscripciones marchan, de nuevo, a un excelente ritmo.
La organización ha sacado un decálogo de razones para estar en la línea de salida el 22 de octubre
• El reto: Pure Triathlon está diseñado para que el triatleta, con independencia de su nivel competitivo, se sienta a gusto en la prueba. Terminar la prueba es tu objetivo y Pure Triathlon va a hacer todo lo posible para que estén preparado y convencido de que lo vas a conseguir. Si eres debutante en el Half o en el Full, los embajadores de Pure van a ir tutelando, si lo deseas, tu preparación durante los meses previos mediante consejos y tutoriales en las redes sociales o durante un campus de entrenamiento meses antes de la competición. Incluso en los días antes de la prueba tendrás charlas en las que te aconsejarán sobre cómo afrontar la prueba en el aspecto técnico, físico y psicológico. Tu reto es acabar y el nuestro que tengas todos los medios, la confianza y seguridad necesarias para que lo consigas.
• Entorno y clima: La playa de Marina d’Or se convierte en el epicentro de una prueba espectacular que se fusiona como pocas con la naturaleza. La belleza de los paisajes, desde el mar Mediterráneo hasta la sierra de Castellón, crean un escenario único que realza la épica del triatleta. Pocos lugares de España cuentan con un otoño tan suave como el de la costa Mediterránea. Las condiciones climatológicas favorables están prácticamente garantizadas con una temperatura ideal para la práctica del deporte.
• La fecha: Pure Triathlon se celebra el 22 de octubre, en la parte final de la temporada. Es una buena fecha para que todos aquellos que se han quedado con ganas de más tras una larga temporada o que, por diferentes motivos como cancelaciones o lesiones, no han podido cumplir lo programado para el año se quiten la espina y cierren el curso con un buen sabor de boca. Algo así le sucedió en la primera edición al portugués José Estrangeiro. Acudió a Marina d’Or para borrar una mala experiencia anterior y acabó ganando la prueba.
• El circuito: Testado por algunos de los mejores triatletas de larga distancia del país, Pure Triathlon ofrece a sus participantes un circuito exigente, pero no duro. Pero pocas personas mejor que el ganador del pasado año para definir el trazado de la prueba: “Tiene su dificultad, pero te permite andar rápido y disfrutar de toda la carrera, con algunos trechos desafiantes. Tiene todo lo que se puede pedir”.
• Las instalaciones: Además del entorno natural, Pure Marina d’Or ofrece a todos los participantes y a sus acompañantes unos complejos residenciales espectaculares para que su estancia sea lo más placentera posible. Tendrán a su disposición hoteles de cinco, cuatro y tres estrellas, además de apartamentos. Todo ello en un entorno lúdico, repleto de zonas de ocio y restaurantes para hacer más llevaderas las horas anteriores y posteriores a las pruebas. A las instalaciones propias del complejo se unen las que aporta la organización, destacando la zona de meta, situada junto a la playa, con gradas, un escenario inmenso y una pantalla de vídeo gigante. Además, la zona Expo, el lugar donde muestran y ponen a la venta sus productos algunos de los patrocinadores, se convierte en un punto obligado de visita para deportistas, turistas y curiosos.
• El ambiente: Pure, pese a haber celebrado una sola edición, puede presumir de haber logrado crear un ambiente característico alrededor de su prueba. El hecho de que la inmensa mayoría de los participantes y de los miembros de la organización compartan residencia, comedor y las zonas de entrenamiento ha logrado estrechar los lazos entre ellos. “Estar todos juntos se hace especial, ya que no solo haces amistad con el triatleta, sino también con sus familiares. Todo es muy especial”, destaca Iván Álvarez, subcampeón del pasado año.
• Los acompañantes: La atención a las personas que son más importantes para los triatletas en uno de los principales valores añadidos de Pure. Para que el deportista disfrute al máximo de su experiencia tiene que estar tranquilo y sentirse a gusto, por lo que en Pure Marina d’Or se organizan actividades para que los acompañantes también se sientan importantes, como una carrera popular en la previa de las grandes pruebas. También la zona de meta está pensada para los familiares, ya que recorriendo unos pocos metros pueden seguir las evoluciones de su triatleta en cada uno de los sectores.
• Repercusión: Pure es una prueba pensaba para los triatletas populares, pero tratada mediáticamente como si fuera para profesionales. La cobertura informativa durante todo el año y, sobre todo, durante el fin de semana, provoca que lo que sucede en Marina d’Or tenga una enorme repercusión mediática. Además, una decena de profesionales se encarga de inmortalizar mediante fotografías y vídeo los mejores momentos de los participantes.
• Los premios: Aunque el mayor premio para cada triatleta es acabar la prueba, Pure también ofrece una jugosa recompensa de 12.000 euros para los primeros clasificados de sus respectivas clasificaciones. Además, los primeros inscritos serán obsequiados con un regalo espacial y todos los que logran finalizar la prueba reciben su medalla finisher y su camiseta conmemorativa.
• La organización: La empatía de la organización con el triatleta es uno de los factores que más destacan los participantes tras su primera experiencia en Pure. La atención al deportista y la búsqueda permanente de su comodidad para que solo tenga que centrarse en su reto deportivo son premisas innegociables para todos los que forman parte del mundo Pure. Desde las zonas de boxes al guardarropa, pasando por la zona de masaje. Todo y todos están programados en Pure para atender al triatleta y evitarle preocupaciones más allá de las que le esperan en su epopeya deportiva. “Llegué la última a la línea de meta, pero me hicieron sentir la ganadora de la prueba. Todo el personal de la organización me esperaba en el escenario para felicitarme y hacerme sentir una estrella”, resume Chelo Serrano.